Primeramente, si bien estoy tranquilo con la permanencia de Susana Villarán en la alcaldía de Lima no lo contemplo con optimismo. Se trata de una victoria pírrica porque es muy probable que muchos regidores sean vacados.
Luego, los grandes perdedores fueron Marco Tulio Gutiérrez y Luis Castañeda Lossio porque la imagen política de estos se ha visto más mermada de lo que ya estaba. En lo que respecta a Castañeda, éste tiene en su haber el proceso por el Caso “Comunicore”.
Asimismo, otros fracasados fueron el MOVADEF. A estos apologistas del terrorismo nadie los invitó a la contienda electoral.
Tercero, las causas que ayudaron al NO fueron: el apoyo decisivo de partidos de derecha (PPC, AP, Perú Posible y Somos Perú); la campaña de Anel Townsend, visitando sectores populares; las declaraciones machistas de Marco Tulio Gutiérrez; la ausencia de los revocadores durante el debate electoral, el 10 de marzo de 2013; la ausencia de un liderazgo político en el SÍ y de propuestas alternativas a las de Fuerza Social y el PPC; la errónea creencia del electorado del SÍ, quienes al votar con un NO pensaron que así vacarían a Susana Villarán; pero sobre todo, la difusión de unos audios que mostraron a Luis Castañeda Lossio organizando clandestinamente la campaña del SÍ.
Cuarto, otras razones que explican el triunfo del NO se debieron a factores económicos. Muchos electores comprendieron que si perdía el NO tendrían que pagarle a los revocadores lo invertido en el proceso. Igualmente, tanto los electores del NO y del SÍ se dieron cuenta de lo costoso que sería en términos de tiempo y recursos acudir a más de un proceso electoral; además del riesgo de pagar multas y ser inhabilitados. A lo anterior habría que añadir la paralización de obras y proyectos de inversión.
Por último, a partir de ahora la gestión edil de Susana Villarán será vigilada con mayor celo, tanto por los que votaron por el SÍ como por los que eligieron el NO.
Esperemos por el bien de Lima que su gestión no solo siga siendo honesta y honrada, sino también eficiente y con celeridad.
Luego, los grandes perdedores fueron Marco Tulio Gutiérrez y Luis Castañeda Lossio porque la imagen política de estos se ha visto más mermada de lo que ya estaba. En lo que respecta a Castañeda, éste tiene en su haber el proceso por el Caso “Comunicore”.
Asimismo, otros fracasados fueron el MOVADEF. A estos apologistas del terrorismo nadie los invitó a la contienda electoral.
Tercero, las causas que ayudaron al NO fueron: el apoyo decisivo de partidos de derecha (PPC, AP, Perú Posible y Somos Perú); la campaña de Anel Townsend, visitando sectores populares; las declaraciones machistas de Marco Tulio Gutiérrez; la ausencia de los revocadores durante el debate electoral, el 10 de marzo de 2013; la ausencia de un liderazgo político en el SÍ y de propuestas alternativas a las de Fuerza Social y el PPC; la errónea creencia del electorado del SÍ, quienes al votar con un NO pensaron que así vacarían a Susana Villarán; pero sobre todo, la difusión de unos audios que mostraron a Luis Castañeda Lossio organizando clandestinamente la campaña del SÍ.
Cuarto, otras razones que explican el triunfo del NO se debieron a factores económicos. Muchos electores comprendieron que si perdía el NO tendrían que pagarle a los revocadores lo invertido en el proceso. Igualmente, tanto los electores del NO y del SÍ se dieron cuenta de lo costoso que sería en términos de tiempo y recursos acudir a más de un proceso electoral; además del riesgo de pagar multas y ser inhabilitados. A lo anterior habría que añadir la paralización de obras y proyectos de inversión.
Por último, a partir de ahora la gestión edil de Susana Villarán será vigilada con mayor celo, tanto por los que votaron por el SÍ como por los que eligieron el NO.
Esperemos por el bien de Lima que su gestión no solo siga siendo honesta y honrada, sino también eficiente y con celeridad.
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| Largas colas en el centro de votación de la Universidad Agraria. (Foto: Peru.com/Oscar Guerrero). |
